domingo, 28 de diciembre de 2008

Acto de fe

Era una noche buena especial. Una de las tías se iba a disfrazar de Papá Noel, como hacía antes con otros sobrinos, más de 20 años atrás. Todos estábamos ansiosos.
El único agasajado, de 4 años, había sido preparado por todos los demás
Finalmente se hicieron las doce y llegó Papá Noel con la habitual bolsa de regalos, enfundado en un traje de pañolenzi rojo como si hicieran 32 grados bajo cero (hacían 60 grados más), unas botas negras, los guantes, todo. Había descuidado los detalles con la convicción de que con 4 años qué iba a estar mirando esas cosas. Todos recibimos los regalos con alegría y tranquilidad. Cuando el susodicho se retiró dejando su estela de carcajadas el agasajado nos dijo: Ese no era Papá noel. Tenía una máscara, la barba era de algodón y los guantes eran de goma.
Nos miró a todos, inquisidor y desconfiado, un rato largo. Y justo cuando estuvimos al borde de dejar caer por el precipicio de la realidad nuestro propio espíritu navideño, ya cuando colgábamos la toalla con lamentaciones melancólicas, cuando dimos por perdida su inocencia, él retrucó: Por qué no vino el verdadero Papá Noel?
Le dimos una respuesta más convincente que el traje y se quedó tranquilo jugando con sus nuevas adquisiciones.
Y así fue que tuve la oportunidad de asistir al más descarnado y necesario acto de fe.
Y pude comprender que la esperanza es lo último que se pierde.

miércoles, 24 de diciembre de 2008

Frio

Estaban todos reunidos, después del almuerzo de Navidad, sentados en el piso formando un semicírculo alrededor de Gutierrez, que estaba sentado en una silla en el centro y era el único vecino del pueblo que había ido a ver la nieve.
- Contanos Gutierrez, cómo es?
Gutierrez empezó a hablar. Habló por casi dos horas. Se paró, movió los brazos, las piernas, sudó inspiración.
Y tan buen mensajero fue que cuando dejó el rancho aún adentro estaban tiritando de frío.

lunes, 22 de diciembre de 2008

"Otra vez me perdí"

Dicen que lo que caracteriza a los hombres como tales, lo que nos diferencia como especie de los demás bichos que circulan por esta bendita tierra, es la razón, la inteligencia.
Yo creo que lo que nos diferencia es la infinita inherencia a repetir. A meter los dedos en el enchufe cada vez que podemos cuando somos chicos, a volver a andar los mismos (indecorosos) caminos cuando ya somos un poquito más grandes.

sábado, 20 de diciembre de 2008

Ella =/= Él

Me fue dado observar en una brevísima pero intensa escena la diferencia entre una y otro, entre la encrispada complejidad de la una, y la cadente simpleza del otro.
Sentados a mi lado en un subte, ella, habiendo enviado, en el tiempo que toma llegar desde Catedral a Plaza Italia, unos 172 mensajes de texto desde su celular, fastidiada, le dice a su acompañante
- No puedo contarle todo por aca - enseñándole el minúsculo aparato, al borde de las lágrimas - qué le pongo?
Y él, sin pensarlo un segundo, sin siquiera dejar de leer el diario que llevaba en las manos, le dijo - Que la llamás después.
Sencillo, concreto, cerrado, contundente y perfecto.
(No todos tienen la capacidad de mirar la fotografía completa.)

miércoles, 17 de diciembre de 2008

Tiresias, hoy

- Hola, soy Brenda.
- Encantada, soy Daniela.
Silencio.
- Hace mucho trabajás acá?
- No, hace un mes, vos?
- Yo hace casi 2 años, pero no te había visto nunca.
- Ah, puede ser. Es que yo vengo solamente los miércoles.
- Ah, por eso.
Silencio de nuevo.
- En realidad soy hombre...
- Aha, mirá vos, no se nota.
- Si, mi nombre es Marcelo...
- Dichosa de vos.
- Vos decís? No es tán fácil.
- Insisto, dichosa de vos que pudiste transitar ambos caminos y elegir donde quedarte. Dichosa de vos que te animaste. Mirame a mi, yo me tuve que conformar con una sola opción.

Conclusión: más dificil que bancarse lo que uno es, es bancarse lo que uno no es.

martes, 16 de diciembre de 2008

El atroz encanto de ser mediocre.

Voy caminando por la calle y veo, primero, una pareja besándose descaradamente en un banco de una plaza de barrio, ambos dos, ella y él, de uniforme escolar.
Más adelante me cruzo con un tipo vestido de payaso arriba de unos zancos que, luego de que el semáforo mutara a un verde esperanza, iba hacia la otra esquina para encontrarse con ella, una chica en igualdad de condiciones, con el único fin de acariciarte la frente.
Más tarde, dos punks, con sus borceguíes y su ropa negra, su cara pálida como una nube, en silencio se miraban, y ella apoyaba su cabeza en el oscuro hombro de su compañero.
En un bar, dos individuos a quienes no les quedaba un blanco en la piel, llenos de dibujos tatuados por vaya a saber cuál motivo, juntaban sus manos en el medio de la mesa. Y también las miradas.
En la esquina de mi casa, un señor se sube a su auto, lujoso y tremendo, llamativo e importado, hablando por su i phone, dejando su maletín en el asiento trasero, acompañado de una señorita de unos 23 años de piernas kilométricas y minifalda milimétrica, vestida de uniforme, seguramente su secretaria
Ellos, todos ellos, tienen algo a favor. Todos ellos se reflejan, de ningún modo les resulta difícil encontrarse, juntarse. Fácilmente son llevados a su lugar de pertenencia. Quizá siquiera necesitan correr un riesgo.
Y yo, que tengo un poco de cada uno, que he sido un poco de cada cosa pero no he encajado en ninguna, sufro todavía y a esta altura las peripecias de tener que encontrarte.

miércoles, 10 de diciembre de 2008

Según pasan las horas

Este mediodía pasé por Plaza de Mayo. Pasé en colectivo y desde allí pude ver cómo se originaba una manifestación. Era pacífica, casi artística. Gente con nenes, con banderas. Hasta había uno que tocaba la guitarra en un escenario armado, estimo, para la fecha: 25 años de democracia. Yo no soy adepta a las marchas, manifestaciones, piquetes y eso, salvo que me peguen cerquita. Pero esta me conmovió. La democracia, pensé en ese momento, tan joven, tan chiquita, tan vapuleada, tan amasada, y sin embargo democracia al fin. Recibida con alegría por aquellos que han sentido el dolor de la no libertad, el asedio de los milicos, pensaba yo con los ojos entrecerrados y la piel de pollo, por aquellos que han perdido gente, hijos, hermanos, padres, amigos.... Yo crecí prácticamente en democracia, le llevo tan pocos años que no vale la pena el recuerdo. He sabido sentir el dolor de alguien que sí sufrió el cautiverio anterior. Y así seguía yo, con mi corazón compugido y el alma socialista, recitando a Mafalda, pensando en la libertad. Llegué a mi casa, me olvidé, pasó el día.
Más tarde volví a pasar por la Plaza, hace un ratito, unos minutos. No quedaba nada de eso que vi al medio día, salvo pedazos de papel ensuciando el cesped, policias, vallas desordenadas, canas cagados de calor. Periodistas enrollando clables y algunas personas tiradas en la calle, tiradas por propia convicción, no?, un cartel de FUBA y banderas rojas del partido Obrero. Una voz femenina se oía a los gritos pretendiendo dar un discurso a unos treinta pibes que no prestaban atención en absoluto. En fin, un acto político de cuarta montado sobre las sobras de lo que horas antes había sido un festejo.
Mi tía solía decirme: nena, nada es para siempre.
Yo soy conciente de lo inexorable de todas cosas, de su inevitable decadencia, pero no creí que ocurriera tan rápido.

Habrá poesía?

Tuve un sueño. En él yo me despertaba en mi cama, en mi cuarto, como cualquier día, con la diferencia que estaba lleno de cosas. Objetos, cosas de la más absoluta belleza. Yo miraba todo entre desconcertada y contenta y veía a mi abuela que me decía: ''Son para vos, todos estos regalos son para vos'' y ante mi pregunta ''de dónde los sacaste?'' me dijo ''no importa, son mi regalo, mi regalo para vos''. Me desperté ahí, me desperté alegre, me desperté sonriendo. El detalle es que ella, mi abuela, murió hará unos 5 años.
Le conté a una amiga, toda racional ella, y me dio una explicación sobre diversos factores coyunturales, edad, nivel de alcohol, fecha del año, etc, que armaron el sueño. Otra me dijo ''ah, qué lindo. Vos lo tomas amargo o dulce?'', mi madre me dijo: ''le voy a jugar al 48''.
No sé, quizá todas tengan razón. Yo prefiero creer que algo de eso sí pasó. Que un día de estos voy a recibir un regalo, y hasta se me ocurre cual.
Insisto, sin poesía no hay nada.

viernes, 5 de diciembre de 2008

Moria Dixit

En una disputa entre su cena con amigos y la de ella con la familia, el asunto termina en:
Etapa uno:
- Mi vida, mi amor, si sabía que era tan importante ni organizaba salir con los chicos. No te preocupes. Lo paso para otro día, para el lunes que vos tenés curso y llegás tarde, si?
Etapa dos:
- Uy, bueno, mirá. Te propongo un trato. Yo no puedo cancelar esta cena con los chicos, porque la venimos armando hace rato. Pero vos andá a lo de tus tíos, pasalo lindo, y el fin de semana nos vamos a Mar de Ajó, solos, los dos, querés?
Etapa tres (probablemente la última):
- No me rompás las pelotas. Y si querés llorar, llorá.




miércoles, 3 de diciembre de 2008

Exceso

Con una mínima pizca de sal que está de más se arruina el mejor de los manjares.
Con una estrofa de sobra se pierde la armonía del más maravilloso poema.
Con una nota extra, una nota forzada, la melodía pierde belleza. Se transforma en cualquier otra cosa.
Si tomás más de lo necesario la más absoluta alegría se transforma en miseria angustiosa y patética.
Si te jugás una ficha más, una sola, si no sabés cuándo parar, puede pasar que la fortuna se transforme en deuda.
Si te comés otra milanesa la satisfacción se transforma en gula.
Podría así seguir dándote ejemplos, ad eternum.
Por eso, querida, no insistas. Si te quedas a dormir, este polvo magestuoso y celestial se va a ir a la mismisima mierda.
En serio, andate, mañana te llamo.

lunes, 1 de diciembre de 2008

Mañanero

- Ordená eso, si está sucio, ponelo para lavar.
- Está bien.
- Ah, y traé el vaso de la mesa de luz, que se marca.
- Bueno.
- Qué vas a hacer con la remera esa? la vas a guardar? Está limpia o la pongo en el canasto del lavadero?
- Cuál?
- Esa, la que está en la silla.
- No, No sé...
- Dale, que en 10 minutos tenemos que salir.
- Si, ya sé...
- Guardá la revista, quérés? Así después, cuando viene Lili no la tira, porque lla sabe que si no está guardado es para tirar.
- Si, ahora la guardo.
- No, dale, guardala porque en diez no vamos. Dónde vas? Dale que es tarde.
- si...
- La agenda, agarrá la agenda que te la vas a olvidar.
- Si, voy al baño...
- Otra vez? Por qué te pusiste eso? mirá que hace frio. No tenés abrigo? Querés que te busque uno?
- eh? no pero...
- Tenés plata? no salgas sin plata. Cómo haces hoy? Tenés curso?
- eh... si...
- Cual de los dos?
- Emm, hoy lunes...
- Ah, bueno, tendría que ir al súper, me querés acompañar? Trajiste el vaso del cuarto?
- A donde?
- Al súper. Trajiste el vaso? Por qué no traes las toallas así Lili las pone en el lavarropas. Hablaste con tu mamá?
- Pará, qué me decís?
- Las toallas. Y después que haces? Tenés todo? No te olvidás nada? Tu mamá!
- Mi mamá?
- Las toallas!
- ...
- Pero, qué te pasa? Por qué llorás?
- Un poco, callate un poco, un ratito, no ves que son las 8 de la mañana?
- Qué desagradecido que sos, yo que hago todo por vos y mirá cómo me tratás...

Dicen que hablando se entiende la gente.
Antes del medio día no todo el mundo tiene la capacidad de entender a alguien.

lunes, 24 de noviembre de 2008

Enfermedad o remedio?

Ramón era un pibe que toda su vida estuvo enamorado de Fernanda. Cada vez que nos juntábamos a charlar era su tema de conversación, sin excepción. Fernanda de acá, de allá, ad infinitum. Más de uno de nosotros se comió un garrón cuando osó contar que, de tanto oir ese nombre, irremediablemente y bajo jugarreta del destino, terminó soñando con ella.
Fernanda. Fernandita.
Un día de noviembre a Ramón se le dio. Parece que una prima suya, lejana, al final era amiga de esta piba y se encontraron en un lugar común, un evento. Charlaron, intercambiaron mails, teléfonos, saraza y salieron.
El día inmediatamente posterior de esa salida, que era para todos importante, lo fui a ver a su casa. Cuando llegué encontré todo en penumbras, el aire viciado tal que parecia 8 de enero. Había claramente olor a sexo. Dejé de sonreir cuando vi a Ramón sentado en la silla de la computadora, solo, en silencio. Triste.
- Pero Ramón, qué te pasa?
- Ya todo dejó de tener sentido para mi - dijo, y apoyó su cabeza rubia sobre sus antebrazos, cruzados sonre la mesa.
- Te fue mal?
- No, me fue perfectamente. Salimos, tomamos cervezas de todos los colores, cuando nos estabamos yendo del bar fue ella la que me sugirio venir para aca. Cuando se sacó el vestido floreado primaveral me encontré con un corsé negro de vinilo, medias red, tacos aguja hasta arriba de la rodilla. Tenía atado un látigo de terciopelo a un costado del cuerpo, unas esposas de peluche fucsia en el otro. El sexo fue de lo más sucio, soez y reventado que he tenido en mi corta existencia. Al finalizar el tercero me temblaban las patitas, tenía cosquilleos en el huevo izquierdo y me sonaba la rodilla cada vez que respiraba. Fue increíble. Me regaló esto - me mostró una tanga minima, de esas que tienen cierre desde adelante hacia atrás, roja de latex - que hizo que, atado y de rodillas, se la sacara con los dientes. Me atenazó las tetillas con dos broches de colgar la ropa, los de plástico que son más jodidos, mientras me tiraba de los pelos de las axilas. Me tiró cera caliente una vez que me ató tobillos a las muñecas, me metió el taco de su bota en el ombligo y me dijo que la puteara hasta que se calentara, porque sinó iría a parar a otro agujero. Después igual siguió con el otro agujero. Me bañó en ginebra Bolls y me lamió hasta que no quedó ni el olor, después al reves cuanto la até yo como a Tupac Amarú y gritaba extasiada de lujuria. Cuando se fue me dijo que la llame cuando quiera, que tiene en su casa un cuartito preparado con los más variados instrumentos de tortura para que use con ella, que esto era solo una puntita de todo lo que viene después. Es pura fantasía. Es la mina más viciosa que existe, que conocí y que voy a conocer. Me ha dado a probar artilugios impensados. La más experta prostituta africana se dislocaría más de una articulacion tratando de hacerlo.
Está hecha de marmol, nívea y suave. Además tiene un culo que parece tallado. Es toda ella el templo de los más absolutos excesos.
Yo, que no lograba controlar mi imaginación, que no podía evitar desear llevarme esa tanga a casa para retenerla abajo de la almohada, olerla, masticarla, usarla, alcancé a preguntarle.

- Ramón, decime, por el amor de Dios, qué tiene eso de malo?
- No entendés? Qué voy a desear ahora?
La mayoría de las veces, no es lo que se desea, sino desear lo que a uno lo mantiene vivo.
''Cuando los dioses quieren castigarnos, atienden nuestras plegarias'' O. Wilde.

domingo, 23 de noviembre de 2008

Otras yerbas

Afiche.
Cruel en el cartel,
la propaganda manda cruel en el cartel
y en el fetiche de un afiche de papel
se vende una ilusión, se rifa el corazón...
Y apareces tú
vendiendo el último girón de juventud
-cargándome otra vez la cruz-
Cruel en el cartel te ríes, corazón,
-¡Dan ganas de balearse en un rincón!-
Yo te di un hogar...

Siempre fui pobre pero yo te di un hogar.
Se me gastaron las sonrisas de luchar,
luchando para ti, sangrando para ti.
Luego la verdad,
que es resfregarse con arena el paladar
y ahogarse sin poder gritar.
Yo te di un hogar... ¡Fue culpa del amor!
-¡Dan ganas de balearse en un rincón!-
Ya da la noche a la cancel su piel de ojera...

Ya moja el aire su pincel
¡y hace con él la primavera!
Pero qué?
si están tus cosas pero tu no estás
porque eres algo para todos ya
como un desnudo de vidriera.
Luché a tu lado... para ti
-¡por Dios!- ¡y te perdí!

miércoles, 19 de noviembre de 2008

Me engañaste, me mentiste...

Me dijiste que un clavo saca a otro clavo, y lo único que hace es clavarlo más adentro.
(Ahí donde más le duele a uno)

martes, 18 de noviembre de 2008

Lo pedís, lo tenés

Ayer leí un chiste de Maitena, en el que había una mujer que, sobresaltada en la cama como quien viene de una pesadilla, decía:
Ups! Soñé que se me cumplían todos mis sueños!
Mutatis mutandi, el otro día un amigo me contaba algo similar.
Me lo encontré en un bar, estaba pálido, mirando el más allá desde su mesita al lado de la ventana, abrazando con los deditos un vaso de cocacola ya vacio, sucio, caliente.
Me miró, estaba pálido, me siento y le digo: qué te pasa?
estaba indeterminado, ni asustado, ni triste, ni feliz, estaba ahí, blanco y mudo.
- Estuvo con alguien más...
- Quién?
- Ella!
La mano venía así: hace poco que estaban saliendo pero venía muy intensa la cosa. Ambos acababan de salir de una relacion hacia poco y estaban con esa disyuntiva: arranco de nuevo o sigo solo? Entonces quedaron en tener una relacion liberal. Que cada uno haga lo que se le plazca, que no hay riesgo de lastimar a nadie porque aunque estuvieran juntos, podían disponer de su cuerpo, voluntad, tiempo y espacio como se les cante.
- Me contó que antes de anoche salió con un flaco y terminaron en un telo. Todavía tiene el pelo mojado.
- Pero... no habian quedado en eso?
- Si, pero era necesario??? Tan rápido???
Mas allá de que no he conocido aun persona alguna que no contemple la exclusividad (la propia, de más está decirlo) como un valor acsoluto, y que cualquier daño contra ella es tomado como una herida mortal al ego físico, la libertad no es para cualquiera.
Todos nos hacemos los pistolas, todos somos modernos de la boca para afuera, pero a la hora de los bifes no hay nada más digno que una buena mentira... piadosa.

martes, 11 de noviembre de 2008

''El deseo es una equivocación''

Ahora que me separé de Luis, voy a ir a buscar a Juani. Ese sí, ese es el hombre de mi vida. Me acuerdo cuando estabamos juntos, era una fiesta! tan buenmozo, tan inteligente. Me acuerdo que veía sus ojos, ''ojitos de caramelo'' le decía porque me conmovía tanto que los pelos de la nuca se me erizaban. No sabés cómo extraño esas charlas, horas de conversar, de intercambiar conceptos, ideas... me dejaba mirándolo y pensando ''cómo puede saber tanto''. Ni hablar que los revolcones más sucios y reventados los he tenido con él. Nos separamos, nos distanciamos una vez después de varios años, idas y venidas, desencuentros. Bueno, vos te acordás. Es una pena, aun extraño el gusto de sus besos entre vino tinto y tabaco, el perfume de los abrazos, la voz...
Luis, pobre... Luis es bueno, pero es tan simple que... no sé. Me dio muchas cosas, me acompañó y eso que siempre fui medio hija de putas con él, así, yegua que no le dejé pasar una. Y él más se quedaba. Vos sabés que no lo quería realmente, qué se yo. Vino en un momento de mi vida en que yo me dejé llevar, y bueno. Llegué más lejos de lo que me propuse. Pero ya pasó todo eso, ya estoy aca, con las puertas abiertas adelante mio mostrándome todos los caminos posibles a tomar, todos ellos repletos de libertad, fresca libertad, posibilidades infinitas, proyectos y oportunidades. Nueva vida. Y voy a buscar a Juani, me decía inquieta. La ayudé a encontrar al susodicho, cosa que no fue nada difícil por sobrados motivos. Hablaron por teléfono y quedaron en encontrarse en un bar.
Ahí fue nuestra primera cita solos, me decía toda exitada mientras se ponía rimel.
La acompañé hasta el bar, la dejé unos pasos antes, y me quedé esperando. La vi llegar a la puerta, mirar hacia adentro, dar media vuelta y volverse. Palida de la desilusión.
Fue horrible, cuando miré hacia adentro vi un despojo sentado en una mesa, pelado, canoso en lo que le quedaba. La vida ha hecho una brochette con él y me ha devuelto eso que vi. Arrugado, transpirado, con la camisa abierta hasta el ombligo. Fumaba con desesperación, en el medio de la mesa había un cenicero repleto de colillas y una cerveza por la mitad. Tenía la piel opaca... fue desvastador. No pude entrar.
Le pregunté si estaba segura de que era él. Sí, era él, los ojos eran los mismos, salvo que ya no se parecían a caramelitos, estaban como asqueados, más bien eran soretes de perro. Mientras me decía esto, buscaba algo en su cartera. Le pregunté qué necesitaba.
El celular, para llamar a Luis.

lunes, 10 de noviembre de 2008

El, Ella

- No quiero que te falte nada.
- Hay algo que igual no me vas a poder dar.
- No, yo te voy a dar todo.
- Yo me voy a encargar de que no sepas qué.

Fe de Erratas

Estaba desayunando en un bar, un día hace poco.
Estaba sentado junto a la ventana, tomando mi café con leche, con jugo de narajna, con media lunas de manteca con agregado de dulce de leche. Con el diario, un libro, y otras cosas. Estaba cómodo, en ojotas. Era una mañana de casi verano pero había una fresca que mejoraba todo.
Estaba echándole azúcar al café con leche cuando se sentó una pareja al lado.
Desde el vamos ella tenía cara de tujes, y él, pobre diablo, la miraba con cara de ''y ahora qué habré dicho''. Ella no hablaba, y el le preguntaba qué iba a querer para desayunar. Pidieron, cuando se fue el mozo con la comanda, ella le largó el fardo.
- Así que vas al civil, solo.
- Qué civil?
- El de enero.
- Ah, si, si queres venite, pero como es viernes y vos laburas...
- Claro, ahora me decis que vaya, pero hace un rato no. Sabés qué? andá solo. Andá. Yo, si tengo un novio, no voy sola a ningun lado.
- Pero mi amor, yo quiero que vengas, siempre quiero que vengas, pero pensé que se te complicaba por el trabajo.
- Si, claro.
- Además, mi vida, faltan 3 meses casi, no nos adelantemos.
Silencio. Yo embadurnaba mi media luna con dulce de leche. Ella revolvía su licuado frenética. Y él, cosa de lo que en el acto se arrepintió, preguntó:
- Qué te pasa mi vida?
- Nada... Me estoy replanteando toda esta relación...
- Por qué? por lo de enero? pero bicho..
- No, es que hace cuatro sábados que no estamos juntos.
- Bueno amor, me hubiera encantado que Juani tuviera su acto del colegio otro día y que encima estuviera mi ex allí, porque es su madre. Ni que le hagamos la despedida de soltero a Pablo este sabado porque tiene que viajar al exterior hasta el dia de su casamiento. Se hace un sábado porque viene del pueblo para eso, ya te había dicho. Ni tampoco que yo tenga que viajar este fin de semana, ya sabés, tengo una reunión de trabajo y yo no soy quien establece los horarios en ese caso. Además, Mary, prácticamente vivimos juntos...
- No es lo mismo. Cómo puedo pensar en tener una relación seria con alguien si se va cuatro sábados?
- Pero bicho, de domingo a viernes estuvimos juntos!
- No, no - decia mirando el horizonte - No es así. Vos tenés que pensar que no es normal. Yo no puedo proyectar a largo plazo si no te veo los sábados.
- Pero mi amor - el tipo tiene los huevos de platino - fue excepcional, se dio así, vos sabés que fue así. Entiendo que te moleste, pero aprovechá, salí con tus amigas, divertite.
- Ah, no, cómo me decis eso? El hermano de la amiga de mi compañera de curso nunca deja a su novia los sábados, hacen todo juntos. TODO.
- Pero qué tiene que ver?
- Nada, dejá, al final yo doy todo, todo por vos y vos ni lo valoras. Y no es que te esté pasando factura, no senor, es sólo que... bueno. Dejá. Andá y pasala lindo. Yo ya veré qué hago...
- Mary, mi vida - yo ya me hubiera ido a pedirle un sifón al mozo para sacarla a la vereda a esa perra infernal - yo te entiendo. Es verdad que si vos salís todos los sabados del mes sola a mi seguro me molestaría, pero no sé si me voy a replantear la relación por eso.
- No entendiste, no me escuchaste. Dejá Daniel, dejá. Andá divertite, yo me quedo viendo tele, esperándote. Se ve que no me conocés nada...
- Bueno, no sé qué decirte...
- Y claro. Ahora te callás, no? ves que no te importa una mierda lo que me pase? Yo la verdad que doy todo, hasta lo que no tengo para que estemos bien, para que no te falte nada...
La charla siguió, siguió hasta que perdí la cuenta. Y se me terminaron las medialunas.
Pagué y me fui a mi casa. Cuando iba caminando se me ocurrió que Dios durante la creación ha tenido una falta, una falla sintáctica que nos ha dejado un estigma, o una alianza. Se ha olvidado una coma (,), debió querer decir, seguramente, 'No, es bueno que el hombre esté solo'.
Por suerte, tengo la habilidad de leer entre líneas.

lunes, 3 de noviembre de 2008

Oído al pasar

'Siempre fuimos el jamón del medio, siempre nos usaron cuando lo ameritaba la conveniencia, pero al final nadie se hizo cargo del todo y la situación cambió. Hemos crecido y crecido. Ahora ya somos un completo cerdito.' Decía una señora muy enojada e indignada, haciendo referencia a la villa 31, donde vive con su familia, en relación a la inseguridad de las construcciones precarias, aludiendo a las acciones, o falta de ellas, por parte del gobierno, y a mi (no por la situación, se entiende) me dieron ganas de aplaudir de pie.

sábado, 1 de noviembre de 2008

Yeta

Cuando era chico me decían que yo tenía o atraía a la mala suerte, a la yeta, que era pájaro de mal aguero, se tocaban partes íntimas al verme, llegué, por inercia o costumbre, a olvidar mi nombre por 'innombrable'.
No le había dado crédito a nada de eso hasta que esta noche, cuando venía caminando a casa, diviso a lo lejos un gato negro que alegremente cruzaba la calle, que distraído aceleraba el paso hasta que me vió. Se detuvo en seco y, emulando al colibrí, huyó marcha atrás.
Me sorprendió la destreza.

Lo último que supe del gato fue por su llanto ahogado, desesperado, allá a lo lejos (inmediatamente después de una frenada).

Me di cuenta que ya estoy grande

cuando un sábado, sin ser las 02.00 AM aún, vi desde el auto en el que iba de copiloto cuando volvía de un asado de mujeres, decía, me di cuenta cuando vi desde el auto a unas cuatro o cinco chicas, vestidas ellas de minishorts o minifaldas o minialgo, peinadas a rabiar, maquilladas y perfumadas (eso me lo imaginé o lo recordé, es lo mismo), unos tacos aguja no inferiores a 12 cm, con ánimo de reviente psicodélico, sexo droga y rocanroll (eso tambien, perdón), insinuando una entropía hormonal de una belleza absoluta y yo, que me venía sosteniendo el hígado porque me dolía, oliendo el humo en la ropa de mi acompañante que ofició de asadora, lo único que deseé en ese instante fue llegar a mi casa y meterme en mi cama, acurrucada en la suavidad mis sábanas, ideales e inmejorables.
Y sola.

miércoles, 29 de octubre de 2008

No me mientás

En la calle se puede ver una publicidad de un programa que va a empezar, Los exitosos Pells. El subtítulo dice: 'la realidad no es lo que parece'
y doy fe. Una vez fui a Easy a comprar un caño, un cañito para colgar la cortina, un cañito de mierda o de metal.
Tras horas de circular por las instalaciones encuentro la góndola correspondiente (me habían mandado a todas las góndolas según el entendimiento de cada uno de los allí presentes), veo que los susodichos medían un poco más de lo que yo necesitaba. Ya cansada, con calor, hambre y sed, diviso a lo lejos una remera naranja que se acercaba. Era un vendedor, un repositor, o algo, lo mismo era.
Yo, una chica, promedio pero chica al fin, pregunto:

- disculpame
- si
- He visto que aquí tienen estos caños, que yo necesito. El problema es que es demasiado largo.
- aham...
- Y bueno, me preguntaba donde aquí me lo podría, cortar...
- Mirá, allá (dijo señalando sin mirar y sin demasiado interes) hay una cierrita y un banquito... Cortalo por donde necesites.
Y sin darme lugar a una respuesta, o un pedido, se dio vuelta y se fue.
Mientras se alejaba pude leer en su remera, atrás, "Estoy para ayudarlo"
La realidad no es lo que parece.

martes, 28 de octubre de 2008

De lejos siempre están buenas

Hace poco vi una publicidad por TV en la que aparecía una chica en microtanga caminando hacia la pantalla. En la medida que se va acercando uno se percata de que no es tan así hasta que, face to face, uno exclama: mamadera! Es un bagre, un gargajo de Dios, una ironía del destino, un buche de geronte, una patada en las pelotas, una acción de Leeman Bros, una milanesa de caca, y así. Después se hace un zapping y listo.
El punto es que esto sucede en todos los órdenes de la vida. No tan exagerado, no tan expuesto y alevoso, pero sí, es igual.
Ya sea un laburo, un proyecto, una película, todo termina siendo una cagada, o al menos ni siquiera una centésima parte de lo que esperabas, que es lo mismo.
O te das cuenta de que querías, siempre quisiste, otra cosa.
Y no podés hacer zapping.
(si no me creen, pregunten a cualquier tipo, cualquiera, que haya pasado los 5 años de casado)

domingo, 26 de octubre de 2008

Como dos extraños

Dejé de fumar hace aproximadamente un mes. o más.
Anoche, en una cena, con bastante chupi encima, alguien prendió un cigarrillo. Después de debatirme por un segundo si lo seguía o no, decidí darme un permiso, total si lo dejé una vez, bien puedo dejarlo dos veces.
En ese instante, el cigarrillo se me figuró como capaz de darme una satisfacción infinita, como una pequeña puerta al frenesí, como capaz de darme ilimitado placer. Lo prendí, lo pité, me marié, lo miré entre desilusionada y aliviada, y lo apagué.
Tiempo atrás me reencontré con un antiguo amor, en quien había puesto todas las expectativas, a quien conservaba en las pompas rosadas del formol de la cursilería, detenido en el tiempo, allá, en su pedestal.
Lo miré entre desilusionada y aliviada, y lo apagué.
Al final era cierto nomás, somos los únicos que tropezamos (más de) dos veces con la misma piedra.
(perdón si me ves lagrimear, los recuerdos me han hecho mal).

sábado, 25 de octubre de 2008

Manifestaciones.

El jueves pasado estuve en la Plaza de Mayo, en la manifestación organizada por todos aquellos que estaban en contra de la estatización de las AFJP. La plaza se llenó de ejecutivos, promotoras, mujeres con tacos y maquillajes, hombres de corbatas y algunos con una remera que decía: 'Cristina, estatizame ésta'. Una kermese de ringtones, anteojos de sol, preocupaciones y gente indignada. En eso, por entre la masa circulaban tres floggers, tres adolescentes que nos miraban asombrados y, mientras filmaban con un celular lo que ocurria, comentaban entre ellos con caras de asombro. Claramente estaban en otro planeta.
Ayer estuve en un casamiento, al medio día, un civil. La jueza habló de deberes, derechos y amor. Algunos lloraban, otros papaban moscas, otros se abanicaban. Luego todos tiramos arroz y nos sacamos fotos con los flamantes marido y mujer.
Más tarde, cuando ya estaba llegando a casa, dos mujeres, una en cada acera, se hablaban con señas y se reían, señalando al perro de una de ellas. Este estaba haciendo pis en una pose rarísima: explayado en su parte trasera con las patas como una rana, y las patas delanteras en cuclillas, miraba a su dueña mientras dejaba un charco. Yo tambien me reí. Cuando terminó, se paró y miró a su dueña con cara de 'Vamos? ya empieza bailando por un sueño.'
La semana pasada leí una noticia en un diario que decía que un hombre fue detenido en no sé qué estado de EEUU por flatulencias. El pobre tipo se rajó un pedo y lo metieron en cana.
Ahora mismo estoy escuchando a un bebé que llora como si lo estuvieran amasando, grita como un condenado. Una mujer le grita para que se calle, y un perro les ladra a ambos.
No sólo Dios se manifiesta de maneras extrañas.

Cosas que te pasan si estás vivo IV

He escuchado más de una vez 'Tené cuidado con lo que soñás que se te puede cumplir'
Mi experiencia, para el caso, es la siguiente.
Una noche soñé que estaba con unas amigas en una fiesta, y entre una cosa y otra nos agarramos un pedo violento, violentísimo, un pedo de ginebra, abrasivo, aspero e insoportable. Se puede decir que el sueño se iba tornando pesadilla.
Tanto fue así que cuando sonó el despertador y me dispuse a levantarme tenía resaca.

jueves, 23 de octubre de 2008

Un pan sexual con un pie

Estoy leyendo un libro, uno de cuentos escrito en forma sumamente poética, que relata historias eróticas, brevísimas, en un marco fantasmático. Sus personajes se componen de animales, niñas, bosques, etc. Mas allá del contenido, la narración es exquisita. Una tarde que estaba leyéndolo, un amigo que se fijó en lo que decía, comentó asombrado: 'qué cosas raras que lees vos. Bichos que hablan y se garchan a las personas. ¿qué son, cuentos para zoofílicos?? Como para que después no sueñes.'
Hace poco había carteles por todos lados que decía: no hay ciudad sin poesía.
yo digo: sin poesía no hay nada.

martes, 21 de octubre de 2008

Se viene el estallido

Un día que llovía torrencialmente salí de mi trabajo y me fui a clases. Al salir de clase el agua nos llegaba, en la planta baja, hasta la rodilla. Me tomé el bondi y después otro. Ya a unas 40 cuadras me tuve que bajar a riesgo de no llegar hasta que viniese Papa Noel. En el trayecto se me perdió un zapato, se me cayó un libro a un charco de agua (tratando de encontrar el zapato. Nada es gratis), me afanaron la billetera, a dos cuadras de mi casa pasó un auto y me terminó de empapar, no era invierno, pero tampoco verano y no se decidía, por ende yo andaba con una camisita coqueta blanca, mojada y con un corpino de setentona abajo... finalmente llegué, emocionada vi la puerta y me relajé. Llamo a una amiga y le cuento mis penas y mi mala racha, mi angustiante odisea en un dia apocalíptico. Y me dice: a mi me pasó exactamente lo mismo, igual, con la diferencia de que al llegar a casa me di cuenta de que había dejado la llave en el escritorio de la oficina.
Una amiga, otra, se quiere ir a vivir con su novio y para eso quiere comprarse un departamento. Días atrás estaba yo tomando mate con un amigo e irrumpe esta chica en cuestión, compugida y como si se hubiera tragado un hamster, nos dijo:'' me pasó la pior, no me dan el crédito. No me da el número del recibo de sueldo porque la mitad la cobro en negro, y Juani es independiente... no me va a salir, voy a ser una eterna inquilina'' sacó una carilina y dejó allí su alma trémula (y verde) Mi amigo, allí, después de escucharla inmutable le dijo. No te preocupes, alquilar no es tan malo. Mi mujer y yo sacamos un crédito en el 2000 para comprar una casita. Nada lujoso, tres ambientes, un jardín, nada más. La encontramos, había que hacerle casi nada, estabamos felices. La primer noche Vale se despertó diciendo: che, qué olor a mierda... nos levantamos, miramos y nada. Al día siguiente revisamos y nos dimos cuenta de que abajo de esas maderas que revestían las paredes del livingcomedor estaba todo podrido. Absolutamente podrido, irreversiblemente podrido. Tenemos que tirarla abajo, hacerla practicamente de nuevo pero no tenemos un mango.
Vale y yo estamos viviendo ahora en lo de mamá.
Días atrás alguien del mundo financiero me dijo: no se puede creer (aludiendo a la crisis económica a nivel mundial), voy a tener que irme a vivir abajo de un puente. Nunca he visto algo así, estamos en el horno, de esta no salimos, saraza. En este momento está dando su discurso la presidente desde el Anses, el motivo es de público conocimiento.
Moraleja 1: siempre, SIEMPRE se puede estar peor.
Moraleja 2: La felicidad puede estar donde menos te lo imagines.

lunes, 20 de octubre de 2008

(no) es una pena todo

Yo tenía unos zapatos que me encantaban, todos coloridos, divinos, que me habia comprado una vez, hace mil años, en algún sucucho de Bs As y que fue amor a primera vista.
Los conservé mucho tiempo, los usé, los disfruté, los caminé, los atesoré. Pero llegó un punto, como todo, en que los pobres no daban más. No sólo que habían perdido el brillo, el color y parte de la suela, sino que me hacían mal a las patas, me dolían los talones, se me salían, cuando llovía se me llenaban de agua y terminaba con una ampolla dramática. Pero yo, firme, los seguía usando.
Ya se hizo insostenible, tenía que cambiarlos, tenía que usar otra cosa, no podía seguir con eso porque estaba ya pasandola mal, además de que estaban pasados de moda que sería lo de menos. Ya no tenían nada que ver conmigo más allá del afecto generado por los años y por alguna alegría que me dio en algún momento.
Una persona, hace unos días, lloraba desconsolada porque se sentía invisible, porque mandaba mails, llamaba, mandaba mensajes de textos, señales de humo, todo invocando a alguien y no recibia respuesta, a esa persona que otrora había sido fundamental, con la que, me dijo, había compartido un montón de cosas que no eran moco'e pavo. No podía entender qué pasaba y por eso se sentía mal.
En otro orden de cosas, en otro contexto, una amiga que se mostraba muy desconcertada, me contaba con enojo que hasta hace muy poco cada vez que se angustiaba o se ponía nerviosa, le empezaba a doler una rodilla y tan fuerte era ese dolor que se tenía que ir de donde estaba para hacer reposo y, de esa forma, se iba de la escena. Ese fue históricamente su modus operandi, pero ahora la rodilla no acusa recibo y se encuentra con que tiene que quedarse en el lugar, enfrentando el asunto. 'Devuélvanme el dolor', decía.
La vida tiene esas cosas. Dicen que Dios se manifiesta de maneras extrañas, yo digo que el que se manifiesta de maneras extrañas es uno mismo.
La mayoría de nosotros tiene la molesta costumbre de aferrarse a las cosas, a los momentos, a la gente. Consecuencia cobarde aunque a veces nesesaria. Pero llega un punto que algo empieza a hacer ruido y no queda otra que dejar el trasto y seguir.
Siempre se trata de seguir adelante, por doloroso que resulte.
Los cambios son necesarios. Cambiar de zapatos, conocer a alguien más de quien nutrirse, cambiar de maneras. El crecimiento se acompana de cambios.
Más vale bueno por conocer que malo conocido.

viernes, 17 de octubre de 2008

Es una pena todo

Dos personas conversaban adelante mio en el subte, una le dice a la otra, entre indignada y jocosa:
- Escuchaste ayer?
- No, qué?
- Dos ladrones entraron a una casa, se le llevaron todo al tipo y lo metieron en el auto, el del tipo que estaban robando, y cuando se metieron los chorros, se dieron cuenta de que no sabían manejar ninguno de los dos y volvieron a buscar al pobre tipo para que los llevara él.
- Una locura... así estamos.
No creo, no creo que sea una locura, es algo que siempre pasa.
sin ir mas lejos, alguna vez me han robado el corazón y y no supieron qué hacer con él.

La diferencia es que no tiene reverso, y eso es más triste.
Infinitamente más triste.

Curioso incidente del perro al medio día II

Caminando por la calle escucho que una persona le dice a la otra: 'anoche me llamó el perro.'
No dijo: '"anoche cuando hablé me dijo perro" o "anoche cuando me llamó, el perro estaba..."
No, no, dijo que lo llamó el perro y su amigo lo confirmó cuando le respondió: "a, sí? y qué dice?".
Seguí caminando, miré a mi alrededor, apagué el celular y seguí caminando.
Era lo que me faltaba.
Por favor, no quiero que cambie, no quiero novedades ni incertidumbres, déjenme en la monótona seguridad que así estoy bien.

viernes, 10 de octubre de 2008

la Odisea de Gervasio.

Iba Gervasio el pajarito muy contento volando. De pronto se hizo de noche y él se había alejado mucho del nidito. empezó a hacer frio y se congeló.
Ya tirado en el piso, a punto de espichar, vino una vaca y lo cagó, literalmente más bien, le dejó una torta olorosa y vizcosa, pero caliente, lo cual permitió al pobre pajarito recuperar la temperatutra corporal y no cagar fuego. Una vez que se sintió mejor quizo salir de ahí, pero la bosta se había secado cual nido de hornero y se empezó a asfixiar. Ya habiendo perdido las esperanzas, ya desfalleciendo en su nicho escatológico, escuchó que desde afuera alguien raspaba la carcaza. Sí! no pasó ni un minuto para que viera el sol a través de un agujerito chiquitito que se iba agrandando. Gervasio, sorprendido por su odisea y alegre por estar vivo aun, dice: oh gato (el que raspaba era un gato) enviado de Dios, oh mi nuevo amigo, no sé cómo agradec...
El gato, lógicamente, se lo lastró de una.
Moraleja: No siempre el que te caga es malo, ni el que te da una mano supuestamente salvadora es el bueno.
Además, si vas a salir, no te distraigas, pelotudo.

lunes, 29 de septiembre de 2008

Memento mori (by Pimpinella)

Una vez me dijiste mientras te atabas el pelo: me voy, me voy porque soy demasiado, me voy a hacer trapecio sin red en un circo en Finlandia, donde reconocen mi talento, me voy porque vos nunca te diste cuenta de todo lo que yo valgo, me voy. Me voy porque aca vos no me podés dar lo que el mundo, yo soy especial, yo merezco mucho más que esta vida chata y sin vertigo. Me voy a hacer collares de papel de diario en las ferias del mundo.
Me voy para darle lugar a mi grandeza.
Y otra vez, tiempo después, sonó el timbre, y cuando bajé estabas ahí con la bolsita de alpillera agujereada, la misma ropa que siempre, con la mirada un poco más triste.
- Fracasé - me dijiste.
- Pasá, sentate, justo estaba por sentarme a comer.

La insoportable levedad del ser.

Venía en el bondi, venía parada agarrada del travesaño. De pronto veo que se desocupa un asiento atras y un señor hace señas. Miro, y no había nadie, estaba dirigido a mi. Me senté y le agradecí.
Al rato empiezo a sentir que me arrincona. Yo estaba sentada contra la ventana y él al lado, en los asientos del fondo, y empiezo a sentir que me apoya la pierna, despues el brazo, y así. Del otro lado, donde no había sentada ninguna chica, había dejado una diferencia de medio metro. A mi me estaba aplastando contra la ventanila. Cuando me había ya dejado poco margen de movilidad, estaba a punto de resolverme en decirle algo, por exponerlo ante los demás como un viejo verde, pero a riesgo de quedar como una loca e mierda, preferí que se sienta mal por si mismo. Tomé mi teléfono como si estuviera sonando y lo atendí.
- Holaaa, cómo estas... Si, bien, bien... vengo del médico, no sa... sisi, ese mismo, bueno, me dijo que es re contagioso. Que tengo que estar casi en cautiverio... no... si, a Juani no sabés cómo le quedó... vos... en serio??? uy nena perdoname, es que... si... y eso que estuve ayer en tu casa 5' nomás... se... a Juani le dio una crema que... si, viste, re cara, pero sinó las ronchas.... A mi me dijo... nono, poné todo en lavandina porque no termina más...
Y yo veía que el señor se alejaba, y se movia. Y, como esperaba, en la parada siguiente se bajó.
Antes de bajarse, entre que tocó el timbre y se abrió la puerta, me miró, me miró fijo, con esa mirada de resignación, como diciendo:
Nena, no ves que estoy viejo? No ves que te dejé el asiento para hacer mi viaje un poco más llevadero? No te estaba haciendo nada, solamente quería olerte el perfume, ver cómo era. Estoy viejo, estoy cansado. No me mira nadie. Solamente quería un poco de fantasía, nada más que fantasía...
Y a mi me invadió un sentimiento de compasión, me arrepentí, me sentí cruel.
La dignidad, la propia, suele estar sobrevalorada.
Como reza el dicho, hay ciertas cosas que no se le niegan a nadie.



jueves, 25 de septiembre de 2008

Cosas que te pasan si estas vivo III

Iba por la calle esta tarde, iba en bicicleta y me había perdido. Entonces paré y me puse a revisar la filcar. Paré en una plaza. Como el día estaba soleado y hacía calorcito había gente tomando sol. Al lado mio para una camioneta, se baja un tipo, de unos treintipico, y se acerca a una chica que a esa altura se había sacado la remera, no logro discernir si era por el calor o porque estaba luciendo un par de adquisiciones. El tipo se acerca y le dice:
- Te puedo regalar algo?
- No... - dice ella, con cara de 'oia, sonso, cómo te atrevés a acercarte...'
- No?
- Bueno, depende... Es gratis?
- Si, si, por su puesto - dice él, sumándose un poroto mientras se acomodaba el saco por la solapa - vení, acercate a la 'chata' que lo tengo ahi. Tengo una fábrica de lencería femenina...
y mientras yo seguía buscando el camino, ella se ponía la remera más rápido que ligero.
- No tengo mucho acá, pero bueno, te muestro y elegí lo que te gusta. Es que te vi ahí y dije: Qué linda chica, tengo ganas de regalarle algo.
y en un minuto el capó de la 'chata' era un despliegue de fantasía y ella con grititos primaverales describía la magia de cada una de las prendas.
Luego hablaron por unos minutos, ella le dio el teléfono y él respondió:
- Esta noche te llamo, te llamo y me decís cómo te quedó, te parece?
- uy, sí, dale, gracias, nos vemos, estamos en contacto.
Él se subió a su camioneta y se fue. Ella volvió a su puesto, guardó el trofeo en la mochila, se sacó la remera y siguió haciendo lo propio.
Gardé la filcar en el bolsillo y seguí viaje.
En otra ocasión, estaba yo esperando un colectivo. Atrás mio habia una chica, de unos 23 años, jugando con el celular. Paró un auto todo tuneado en el semáforo y dice:
- Morocha, te puedo hacer una pregunta?
La chica, cuyo código genético está determinado para responder a ciertas consignas, enseguida respondió.
- Morocha, dónde queda la calle Salguero?
ella dio un par de indicaciones, sonriendo.
- Cómo es tu nombre?
- Sofía
- Sofi, qué linda estás Sofi... te puedo dejar una tarjeta? Me escribis un mail?
- Aia, si, jajaja, cómo no te voy a escribir, después de semejante piropo.
Cuando él se fue, ella volvió a su celular. Ni una mueca, ni un suspiro.
Se suele decir que las mujeres argentinas son las más lindas del mundo. Yo no creo que sea así, pero sí son respondonas. Y eso las hace lindas.
Como dice el dicho: las chicas buenas van al cielo, las argentinas van a todas partes.



martes, 23 de septiembre de 2008

Encuentro lejano del tercer tipo

(Conversación escuchada en un bar, una tarde.)
- Vos seguís de novia?
- Si! Un record, ya van más de cinco años.
- Cinco años??? Hace mucho que no te veía Vale! él sigue allá?
- Sí sí, él está viviendo en Uruguay, en Montevideo. Está trabajando mucho, le está yendo bien, está..
- Pero.. no tiene pensado volverse?
- Volverse? no, si está chocho allá!
- Y vos no tenés ganas de ir?
- A Montevideo? A hacer qué? No, ni en pedo. Yo ni bien me recibí empecé a trabajar y la verdad es que no me puedo quejar.
- Pero qué, entonces no se piensan...
- Juntar, convivir, casarnos? Sil, Qué más quiero? Si él se vuelve, voy a tener que bancarme sus miserias, voy a tener que darme cuenta de que es tan humano como yo. Voy a tener que bancarme su mal humor, a su familia, sus amigos, sus celos, su aliento a la mañana todos los días, la ropa sucia, tendría que ceder gran parte de mi libertad, tendría que donar mi tiempo... perdería la magia. Si yo voy es igual. En cambio así, que nos vemos una o dos veces por mes, nos encontramos, cogemos que da miedo, salimos, nos divertimos, nos emborrachamos, vemos el amanecer, nos abrazamos, nos despedimos, nos prometemos... y se va, y yo me quedo con la fantasía. Y la fantasía es lo que más me gusta de todo esto. Es divino, él es un amor, lo extraño mucho, incluso a veces sufro, pero prefiero eso.
Se hizo un silencio incómodo.
- y vos? - siguió - cómo está Juani? La última vez que te vi se acababan de comprar el departamento, vos estabas con una panza gigante...
- No - dijo, cambiando la voz de pronto - no estoy más con Juani. De hecho estoy en pleno divorcio. Pasado mañana tenemos una audiencia de no sé qué, ya a esta altura perdí la cuenta y lo dejo en manos de mi abogado. Estoy con el tema de la cuota alimentaria porque el hijodeputa no me pasa ni un centavo por Luli. Y el jardín, de movida, me saca la mitad del sueldo casi. En eso estoy. Me mudé a lo de mi vieja, porque compramos el departamento pero como está a su nombre me tuve que ir yo. Encima, como cuando me embaracé dejé de estudiar no tengo título de nada, y hoy conseguir un trabajo mejor es poco menos que imposible. y ahorros no tengo. Así que en eso estoy. Más o menos...
Otro silencio incómodo.
- Eh.. Pedimos la cuenta?

lunes, 22 de septiembre de 2008

'Ex man'

Estaba viendo tele una tarde y haciendo zapping agarro el final de una película, un comics que llevaron a pantalla grande.
Era la escena final, donde había una mujer muy sexy y muy dañina, que por alguna razón se había vuelto mala y destrozona. Todo lo que ella miraba de deshacía en polvo. Y estaba llena de ira, tomada por vaya a saber qué manía del destino.
Su enamorado, su novio, ese que estaba perdidamente enamorado de ella, y a la vez el único capaz de salvar el mundo circundante, se le acercó lentamente, y a cada paso que daba se debatía internamente: Qué hago? la hago cagar - se decía - para que el mundo pueda reconstruírse y seguir adelante? o me quedo con ella y me rompo el alma junto con el resto de los mortales?
La respuesta era tan obvia como dolorosa.
Se acercó, la abrazó, la miró a los ojos, se disculpó y la reventó.
Cuando se deshizo de ella, la escena retomó el color normal, la música violenta cesó y volvieron los pajaritos y el sol. Había mucho que hacer ahi (todos hemos visto una ciudad en ruinas alguna vez).
Más alla del peligro mortal para los humanos que esta escena implicaba, digno de una producción de hollywood y horas de maquillaje, he sido artífice de un acto heróico de esa envergadura: Yo no tengo el poder de salvar el universo, yo no tengo el poder de hacer añicos a nadie ni de reventarte con la mirada, no salen garras de mis nudillos, flacos y lampiños, pero he tenido que matarte para que el mundo, al menos el que conozco, siga a delante.
(la ciudad soy yo)

martes, 16 de septiembre de 2008

Two hundred dollars thank you sr

En un programa de radio el conductor dijo que existe, está de moda, la tendencia a que las chicas tengan sexo con extranjeros. Inmediatamente después de dar su conclusión, invitó a los oyentes a que den sus opiniones.
La gente que en su fuero íntimo se sintió invocada, o las amas de casa que no tienen una poronga que hacer, o los viejos calentones que fantasean con ser foráneos, llamaban y daban opiniones de diversa índole: Que la juventud está perdida, que son todas trolas, que las chicas son una manga de tilingas que se dejan romper el upite por un trago con ron nacional, que por un pete aprenden a hablar en cualquier idioma, que les gusta más la matraca cosmopolita que el dulcedeleche argentino, que no les interesa que haya yerba, etc etc.
El conductor escuchaba atentamente, daba su 'contraopinión' y pasaba al siguiente.
Es verdad. Es verdad que las chicas les gusta el sexo intercultural, y quizá sea verdad que la juventud esté perdida (como mi tortuga, como tu dignidad), pero creo que el motivo es otro.
Yo creo que estamos tan hartos de que entre nosotros nos rompamos el orto, tan podridos de que nos mientan en el mismo idioma que donde vemos un avion entramos a desprendernos el pantalón.
Everyone gets the sweet potatoe that can.

lunes, 15 de septiembre de 2008

cosas que pueden pasar

Si te haces el banana, te podés tropezar con tu pija alucinada y romperte la cabeza, o lo que sería peor para tu ego, tropezarte con una pija gigante y de verdad, pero que no es tuya.
o te puede pasar tambien que te atragantes con tu mala leche y te mueras.
o que pienses que por matar una mosca podes matar un gigante.
En fin, no sé que mas decir, voy a comprar un poco de dignidad en Ebay.

domingo, 14 de septiembre de 2008

El rey está desnudo.

El miércoles pasado, en la frontera entre Suiza y Francia, pusieron en funcionamiento la Máquina de Dios (o Gran Consolador de Ladrones, algo así escuche)*, un experimento que empezó a ser construido hace aproximadamente 20 años y que nos enteramos que existía hace unos días apenas.
Si bien el experimento me parece magnífico, es otra cosa la que me llama la atención: empezaron hace 20 años aproximadamente, invirtieron entre 8 y 10 palos e implica un tunel de 27 km. Y nadie estaba al tanto hasta hace unos días.
Nadie había visto nada, el mundo está a punto de explotar, un error de cálculos y un pequeño agujero negro puede aspirarnos a todos sin asco**, y nadie sabía nada.
En otro orden de cosas una amiga me cuenta que, después de 6 años de ardua labor, se da cuenta de que la explotan (sic), de que la que es su jefa al final era una rata maquiavélica capaz de vender a su madre por un centavo. Pero que se da cuenta ahora, cuando casi se parte la cabeza en un 'accidente-de-trabajo'
Hace poco me ocurrió a mi. En menor escala, con menor peligro para la especie y para mi, pero similar.
De pronto, de un segundo a otro, me encontré sentada frente a dos personas que supuestamente conocía. Con una de ellas había compartido una linda amistad. Con la otra tenía el trato indispensable, sabía que era de la calaña de la jefa de mi amiga, pero como no era mi jefe creí poder manejarlo. Ambos trabajaban conmigo hasta el momento. Se suponía que las cartas estaban todas sobre la mesa.
Ese día, la última vez que los vi, estaba sentada frente a ellos, como decía, como si fueran dos perfectos desconocidos. De pronto la película había cambiado. Era otra la historia, los eventos, el escenario y los personajes.
Y ahí vi. Los vi desnudos (queriéndome empernar), me vi desnuda. Ahí vi. Vi lo que no había visto porque no había querido.
El rey siempre había estado desnudo.
Hay que disculpar y disculparse, pero no tanto.

*http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=1048257
** Yo correría el riesgo.

sábado, 13 de septiembre de 2008

Balance

- Buenas tardes. En qué puedo ayudarla?
- Tengo estrías, o mejor dicho, las voy a tener. Necesito que me de una crema para estrías.
- Aham. Y digame, cómo sabe que va a tener estrías?
- Hasta donde sé, las estrías son una suerte de rajadura en una de las capas más profundas de la piel, no? y que se generan cuando una sube de peso y después baja abruptamente, o cuando la piel se estira hasta casi explotar. Es así, no?
- sí, algo así. Está embarazada?
- no.
- Disculpe la indiscresión, pero como me dijo que 'va a tener estrías' supuse que...
- No, no, dejeme explicarle. No estoy embarazada, ni tengo pensado echar panza en los próximo tres minutos, pasa que me están hinchando las pelotas a un ritmo astronómico. Son mis pelotas las que estan por explotar. Si no puedo evitar eso, al menos, si es posible, quiero evitar las estrías.

jueves, 11 de septiembre de 2008

Que nunca te pase

A veces la vida te pega y te caes, y cuando estas en el piso te sigue pegando.
A veces te quedas en el piso para que te siga pegando, y otras veces te levantas, y seguís, a las puteadas, con desilusión, pero seguís.
Que nunca te pase.
Espero que no creas que no podes.
Espero que no te duermas entre patada y patada.
Espero que puedas a pesar de eso mostrarme los dientes.
y no llorés, porque, insisto, si llorás te morís.



No era para tanto

Tuve un día largo. Tuve un día recorrido. Anduve en una mañana en todos los medios de transportes públicos habidos. Anduve por esta benemérita Capital Federal como un beduino. Además, una concatenación de eventos hizo que varios de esos trayectos fuera lisa y llanamente al pedo. Estaba cargada y hacía calor. Estaba con el malhumor del ayuno excesivo.
Entonces, al terminar el día decidí comprar un mapa de CABA y marcar los trayectos recorridos, y así ventilarme en suspiros de piedad. Darme quizá palmaditas en el hombro diciéndome que ya está, ya pasó, mañana va a ser mejor.
Lo despliego en el piso, regla y birome en la mano empiezo a buscar los puntos... y veo entonces que había ocupado sólo una pequeña porción.

Volví a plegar el mapa y lo guardé. No era para tanto.
Como siempre sucede, visto de otra manera nunca es para tanto.

domingo, 7 de septiembre de 2008

Teorías sexuales infantiles: Ecogarche

Mandamientos de Grinpis para tener un sexo amigable con el ambiente.
(es real, yo no podría inventar esto)
. Apagar la luz. Coger con la luz apagada porque la energía eléctrica hace mal al planeta etc. O cogé de día.
. Cuando vayas a querer calentarte con una fruta de la pasión (no sé qué es), fijate que sea orgánica, si es transgénico no va.
. Siguiendo con los afrodisíacos, los mariscos estan descartados porque son 'bioindicadores de contaminación', entonces si te comés un camarón de desconocida procedencia se te puede caer la pistola y eso no está bueno (no para mi), la leche se te va a poner fosforescente, o los huevos se te van a poner a aplaudir como una foca. Además, son cruelmente 'cazados' en el mar (yo pensé que se pescaban, o algo así)
. Reciclá todo. Es decir, las cajitas de esas pelotudeces que te comprás 15 veces por semana, decorala con lo que quieras (siempre que sea orgánico, o no cazado cruelmente ni bioindicador de contaminación y no requiera energía electrica) y guardá ahí los forros usados y lavados para su uso proximo (no intentes emparcharlos con 'la gotita', no es amigable)
. Usar 'Ecolubricante'. Parece que los lubricantes que uno puede comprar en la farmacia, esos que vienen en pomitos con dibujitos naif en el envase y que son transparentes y normales, a veces con olor a frambuesa, atentan ferozmente contra la supervivencia de las especies, por ende no los uses. Podés usar la lengua o, ya que estamos hablando de reciclar, el aceite que te sobró de las milanesas de la semana pasada, que lo habrás guardado a riesgo de quebrar algún mandamiento grinpisiano de otra índole, pero de igual importancia.
. Tené 'sexo verde'. Es decir, no va más eso de ir al sex shop a comprar artículos de cuero o látigos de terciopelo, esposas de peluche o microtangas de vinilo, no está bueno que te compres el disfraz de mucamita o de bombera voluntaria, no podés comprarte las botas de dominatriz que viste el otro dia y te imaginaste en sus pelotas, nono. Tenés que usar todo natural: En lugar de un consolador usa una banana, por ejemplo, o depende tu exigencia y/o trayectoria podés usar una zapallo anco.
Te podes disfrazar, no seas exagerada, unas hojas de parra en las tetitas y un taparrabo y sos una hermosa Pocajontas. En vez de látigo te podes pegar nalgadas con un apio verde, divino, incluso si te gusta más power, con más fantasía, le pones 'wasabi' en la punta y agarrate.

Todos disfrazamos el asunto copular de alguna manera. Todos le damos un motivo, una meta de cualquier índole, una forma, una razón de ser.
Ya sea amor, ya sea necesidad, ya sea puro placer, ya sea excusa, ya sea despecho, ya sea vicio.
Y la mayoría de las veces es de manera pintoresca. Y todas las veces es magnífico.
No jodamos, gran parte de nuestro agite es lo que los cientìficos llaman 'sexo contranatura' (o 'por popa', como dice un amigo).
Por mi parte prefiero morirme intoxicada con un camarón biocontaminado de pis de comadreja mutante y cojer como Dios manda. Así que, papu, anda poniéndote comodo.
Coger no es amor, es mucho mejor.


sábado, 6 de septiembre de 2008

Canción para mi muerte.

Fui al teatro el otro día. Vimos la obra, muy buena, recomendable.
Hubo una escena que me llamó poderosamente la atención.
El protagonista, a partir de ahora A, iba a ser fusilado por haber cometido unos cuantos asesinatos. El fusilamiento sería perpetrado por el policía a cargo del caso, a partir de ahora B.
La escena que traigo fue la siguiente: B le dice a A que se ponga la capucha (estaban sólo ellos en el escenario) y que se arrodille para poder proceder con el asunto. y A, afligido y resignado, le obedece. Si lo fusila o no no viene al caso.
Al finalizar la obra le digo a mi acompañante:
- Vos qué hubieras hecho? le hacés caso? te ponés la capucha y vas sin más a tu muerte, aún sabiendo que no sos realmente culpable?
- Igual te van a matar.
- sí, es verdad. Pero no asoma ni un vestigio de humanidad? no te rebelas? no peleas ni un poquito?
Lo que me llamó la atención de la escena fue eso. La incapacidad por parte del acusado de defenderse, la anulación total del sujeto, que ahora no es más que una cosa que obedece.
Esa escena me toco el corazón. Me toco la dignidad.
Mi acompañante me dice luego.
- che, ya sé que es miércoles, pero hay una fiesta a la que me invitaron. Llena de fantasía y de condimentos cuasi alucinógenos. Y es completamente gratis. Vamos?
- No, gracias. Mañana me tengo que levantar temprano - le digo - tengo que madrugar más de lo habitual para planchar el uniforme del trabajo y llegar a tiempo para buscar el abrigo de mi jefe en el lavadero, porque hoy se olvidó de retirarlo. Chau, hablamos para hacer algo el fin de semana.
Esperé 35 minutos el colectivo, porque un taxi es muy caro, y me fui a dormir.
En el viaje me di cuenta de que entre A y yo no hay mucha diferencia.
A se pone la capucha y yo mi uniforme.
A va a su muerte, yo a la mia, pero en pequeñas cuotas, todos los días.
A y yo, y todos los demás, cada uno tiene la batata que puede.

jueves, 4 de septiembre de 2008

No me hinchés las pelotas.

Hay una ley que dice:
'nadie entiende a las mujeres'
Yo entro en el bando de 'las mujeres', pero también en el de 'nadie'
Estoy triste, no me preguntes.


Boys like girls

Ante la pregunta: existe la amistad entre el hombre y la mujer?
Respondo con un ejemplo.
Me llama un tipo, uno que ya conocía, y me invita a salir. Yo accedo.
Fuimos al cine, vimos la película que gentilmente me dejó elegir. Comimos pochoclos con cocacola ligth, comimos caramelos, comimos.
Después fuimos un restaurante, tomamos vino, comimos divinamente.
Después fuimos a su casa, abrió otro vino. Hablamos largo, escuchamos musica, etc.
A las tres de la mañana me dice: - vamos a dormir?
- si, vamos - dije, lo agarre de la mano y me dejé llevar.
Nos tiramos en la cama, seguimos charlando, todo bien, zaraza.
Hasta que me abrazó y se torró. Se torró.
Yo estaba lista y en llamas y se torró.
Pensé que quizá era el alcohol, que quizá era viernes, y eso.
Al otro día me despertó, lo dejé actuar y nada che. Me dice: Vamos a desayunar? conozco un lugar que...
- No - dije yo - No puedo.
Metí una excusa promedio y me llevé la indignacion de ahí porque no cabíamos las dos.
Así que, ante la mencionada pregunta, respondo: sí, existe. Estoy segura de que existe. Es sólo que aún no se ha dado ningún caso.
(Creo que es porque nunca la queremos al mismo tiempo)




El extraño suceso del perro a mediodia

Iba caminando por la calle, saliendo de mi casa. En eso veo un perro callejero, con cara de punga, petiso, flaco, porteño.
Estaba parado con las cuatro patas rígidas, estiradas, haciendo una caminata lunar pero sin moverse del lugar. El movimiento era enérgico, convincente, como si empujara algo para atrás, como si estuviera enterrando algo pero estaba parado en una vereda de baldosas rojas.
Me lo quedé mirando. Se dio cuenta y me echó un ladrido cortito y seco, como diciendo: 'qué mirás, salame?'. Yo le respondí 'no, yo...' y sin dejar de mirarme, con su cara de punga, murmuró algo por lo bajo y se fue.
Estimo que el perro se estaba deshaciendo de algo, estaba enterrando algo. Y yo lo interrumpí porque me sorprendió la facilidad, la determinación.
Los perros son buenísimos. Lo que a mi me lleva tiempo, meses, quizá años, ellos lo hacen con un revoléo de patas.
Así que ya saben, si por estos días me ven haciendo lo propio no me interrumpan, soy un poco menos paciente que el perro, y lo más probable es que me ponga a llorar.

miércoles, 3 de septiembre de 2008

Truman Chow

Otro sueño:
Estaba con unas amigas, yendo a morfar a una casa, no sé de quién, en un barrio privado. Íbamos caminando por una de sus calles, cuando la luna entró a brillar de una manera extraña, artificial como el barrio. Con más tristeza que sorpresa vimos que el cielo estaba hecho de cartones pintados de negros, como un techo, descascarados, emparchados, y sin embargo algunos seguían diciendo que teníamos suerte de la hermosa noche que nos había tocado.
No dije nada. Ese cielo estaba sostenido por ellos, por un armazón de falsa satisfacción, mantenido en el tiempo gracias a la eterna excusa de los que se comían el verso de que eran felices en esa vida miserable y acotada, con sus familias prototipo, con sus cuernos y su rutina, su 'qué más puedo pedir?'.
Me fui del barrio, me desperté. Me dio pena.
Todos eran Truman, pero tambien eran Christof.
Así que la proxima vez que se me de por dormirme en la comodidad mentirosa de lo suficiente, háganme el favor de pincharme una nalga con un tenedor parrillero, de devolver la piedra a mi zapato.
No quiero envejecer todavía.

lunes, 1 de septiembre de 2008

Se te contractura la valentía.

Hoy me levanté, me duché, me sequé, me encremé, me miré un poco, me vestí, me contracturé. El cogote se me endureció como un mástil, me dolía como si una tuerca oxidada se hubiera incrustado, aspera y alevosa, entre la quinta y la sexta vértebra.
Me dolía en serio. Se me piantó el lagrimón.
Salí de mi casa, fui a trabajar, me dolía hasta cuando mandaba un email.
- qué te pasa que andás así? - Me dijo el portero del edificio del lugar donde trabajo cuando bajé a comprar morfi.
- no sé, no puedo mirar para allá porque me duele- le dije señalando con el torso a la derecha
- y por qué? qué hay allá?
y yo me quedé con ganas de decirle que no sabía, porque no podía, como le dije, ver allá.
Pero al final tenía razón. Evidentemente ahí hay algo que vi y que me dolió, que no quise ver más.
Y el tirón me hizo cerrar los ojos.
El dolor se manifiesta de maneras ridículas, como por ejemplo una tuerca oxidada entre mis cervicales. De más está decir que la tuerca existe, que la tuerca está allí porque me duele, es real, aunque no sea una tuerca. Es real porque duele.
Que alguien me diga si hay algo más real que el dolor.

Igual, no es la primera vez que me pasa. Aquella vez, atroz, que te fuiste, me quedé sin voz.






domingo, 31 de agosto de 2008

Condiciones para el éxito

Poné, en una película, como si fuera una olla:
Muchos hombres enojados y ambiciosos, entre ellos uno enamorado y desinteresado que quiere triunfar (o, en su defecto, que esté terríblemente triste porque perdió irreductiblemente a su gran amor). Ese tiene que ser un bambi.
Una chica que le vaya (Esa tambie tiene que ser un bambi), autos tuneados, velocidad, pistolas, bombas o armas cualquier calaña, mucha guita que circule entre los elementos, diálogos simples, y chicas, muchas chicas, que no hablen pero que muestren.
Hacelos andar más o menos por 90 minutos y ya está.
y si por esas cosas se te ocurre que las chicas estén vestidas con poleritas kilt, camisa ajustada y desabotonada, una corbatita (opcional) y botas o medias hasta arriba de la rodilla (excluyente), vas a poder vender una parte II.
Un tipo me dijo una vez: 'nosotros, los hombres, somos básicos'
yo agrego que todos somos básicos.
Pero igual, insisto, me hubiera gustado nacer hombre.

(Una vez leí que uno es lo que come. Mentira, ya intenté y sigo siendo mujer)

sábado, 30 de agosto de 2008

Disculpame.

Estaba yo en una fiesta, en un bar que no conocía.
Me agarraron ganas de ir al baño, y fui. Cuando llegué vi que inexorablemente una persona se acercaba velozmente hacia mi, el choque frontal era inminente.
Me frené en seco y dije:
- uy, perdoná.
Y para mi sorpresa era yo, eso que había enfrente era un perfecto espejo.
Me quedé mirando(me). Me sentí bien, me sentí aliviada. Me sentí un poquito más libre.
Hace bien, siempre hace bien, perdonarse.

jueves, 28 de agosto de 2008

Si llorás, te morís.

Estaba en una playa con un grupo de personas, todas de colores y orígenes distintos.
Estábamos en una playa preciosa, celeste, digna.
Había delfines saltando, sonrientes. Había manjares multicolores (entre ellos un escorpión vivo, de gelatina tipo yummi, que según me dijo una de las chicas que estaba conmigo ahí, habiéndose dejado atrapar, ahora quería irse) como en las publicidades de cruceros. Había palmeras, no había nubes, era perfecto. El mar estaba dividido en una parte segura y, pasando una especie de represa, la parte 'riesgosa'. Uno dijo: vayamos a agarrar una sirena. Si, si vamos, dijimos todos.
Era simple: había que meterse al mar cantando, y las sirenas venían y las atrapábamos. Pero ojota, si llorás, dijo uno, te morís.
En la parte segura del mar, en la piletita, no pasaba naranja, una japonesita se metio, cantó y no vino nada, ni una mojarrita mimosa. Ahora había que meterse a la otra parte, a la 'riesgosa', a la que no te aseguraba nada.
La japonesita se despojó de su valentía y me miró. Con la mirada me preguntaba, con la mirada me increpaba, me decía: qué hago, qué harías vos?
Y me desperté.
Y es lógico.
Meterse en la parte no segura del mar implicaba la posibilidad de fracasar. Y fracasar te hace llorar, y si llorás te morís.
Todos queremos agarrar la sirena en la pileta chiquita. Y nadie quiere fracasar. Es más fácil preveer el fracaso que fracasar. Es más fácil llorar sentado en la arena que aguantarse sin llorar en el mar.
(Es más fácil perderse por las calles del miedo, dice el filósofo)
Si fracasás al menos aprendiste a nadar.
Pero si querés llorar, llorá.

martes, 26 de agosto de 2008

Se te escapó la tortuga

Se terminó la utopía de los 20, en la rueda de la fortuna siempre perdés, la figurita difícil nunca esta en tu paquete, la que querés que te llame nunca te llama, te llama la otra. La pareja ideal la tiene otro porque es condición sin equanon que la persona ideal está en manos de otro, o que la perdiste, es lo mismo. Siempre te toca el otro tema en el examen, el difícil. Nunca hay color y nùmero de tu talle, y la mayoría de las veces te arrepentís.
Y mientras tanto se te escapó la tortuga, y cuando eso pasó te empecinaste en encontrar lo que nunca vas a tener: eso que querés, completo, perfecto, hermoso, brillante, pero real porque es imposible (como Dios, como la burundanga, como Angelina Jolie).
Es triste, pero la tortuga siempre estuvo perdida.

Por consultas, tratar aquí.

Formo parte de una cofradía,
gran cofradía gran,
que buscan y generan:
sutiles momentos,
agradables momentos,
transpirados momentos,
alegres momentos,
mareados momentos,
acabados momentos,
libres momentos,
ser el momento!


by Alelí

jueves, 21 de agosto de 2008

El orgullo es relleno de panqueques

Me hago la pistola.
Me hago la que no me importa.
Me hago la que aprendió la lección.
Me hago la que puedo,
pero también me hago cargo.
Al final te voy a terminar llamando yo.

miércoles, 20 de agosto de 2008

Humano, demasiado humano III

Iba yo caminando cual diva por Florida. Vestía una pollera de leopardo al estilo Susana Gimenez, unas botas de cuero negro puntudas acharoladas hasta la rodilla que me sumaban 15 centímetros de estatura, un zorro envolvía mi cuello de cisne, detras de mi una estela de perfume remitía a quien tuviera el gusto a maravillosos paraísos inimaginados. Caminaba como si supiera.
Y yo veía que la gente me miraba, yo notaba que cuando pasaba se daban vuelta para seguir mirando. Mi ego reforzaba mi paso. No me tropecé ni una vez, iba gloriosa por la peatonal como si fuera mia.
Llego a la oficina y el señor de seguridad me dice: Disculpe señorita, tiene la pollera enganchada en la media.
Y sí, desfilé desde Córdoba hasta Corrientes con el culo al aire.
Anoche estaba comiendo con dos amigas en un bolichón. Estábamos en una mesa cerca del baño de mujeres. De repente sale una mujer y cuando veo su irse le descubro algo que colgaba ahí, y no era precisamente una colita de conejo. Dignamente le aviso, y dignamente me agradece y lo arregla.
Yo ya sé, yo entiendo, yo me rio cuando veo que alguien se cae en la calle.

Pero no tengo el culo de Jessica Cirio, así que, por favor, la próxima, sigan el ejemplo.

Humano, demasiado humano II

Acompañame al cajero, al Nación, que tengo que sacar plata.
Llegamos al cajero y un cartel de un rojo (Rojo, no colorado. Estabamos en Caballito) furioso nos avisaba: No hay plata, No se puede, Fracasamos hace rato, No anda, Andate a un Banelco, Cajero fuera de servicio, No inserte la tarjeta porque caga fuego.
Las dos nos acercamos a verlo de cerca, las dos miramos los recónditos lugares de la máquina del demonio. Las dos le pedimos que ande, le hablamos de nuestra urgida necesidad... y respondió.
Porque en el Banco de la Nación De la República Argentina los cajeros hablan.
Nos dijo que alguien puso un papel en la ranura equivocada, que se trabó y estan esperando el técnico. Nos tuvimos que ir.
Nos han dicho que somos del primer mundo. Mentira. En el primer mundo usan la tecnología, aquí aun continuamos usando los enanos.